“… Picasso me había dicho que si ponía una cerámica en el horno,
estaba perdido. Pero siempre me ha gustado perderme en placeres…”
Así fue como Jean Cocteau, amigo de Pablo Picasso se acercó a la cerámica y puedo decir sin reservas que de la misma forma he acabado atrapada en este arte milenario. Unas cuantas pruebas me convencieron rápidamente y muy pronto empezaron a brotar proyectos en mi mente, algunos de los cuales quedaron aparcados en espera de encontrar un mecenas…


¡Viva la revolución! es un proyecto de diseño para vajilla de mesa. Si hasta ahora he llenado las paredes de pequeños lienzos de cerámica, estos platos que sirven de fundamento para alimentarnos, quieren cambiar de contexto y volver a su origen, de la pared a la mesa…







